Bajo el lema “Cada movimiento cuenta”, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publica las nuevas Directrices sobre actividad física y hábitos sedentarios, con el fin de obtener beneficios de salud significativos y mitigar los riesgos para la salud.
En este documento figuran una serie de iniciativas con recomendaciones dirigidas a todos los grupos de edad, niños, adolescentes, adultos y adultos mayores, así como para subpoblaciones, como mujeres embarazadas y en postparto, y personas que viven con enfermedades crónicas o discapacidad.
En un momento en el que muchas personas están obligadas a permanecer en casa debido a la COVID-19, estas nuevas directrices, hacen hincapié en que todas las personas, sea cual sea su edad y capacidades, pueden ser físicamente activas, y que “cada movimiento cuenta para mejorar la salud”.
Toda actividad física es beneficiosa y puede realizarse como parte del trabajo, el deporte y el ocio o el transporte (caminar, montar en bicicleta, usar escaleras en lugar del ascensor…), pero también a través del baile, el juego y las tareas domésticas cotidianas, como la jardinería y la limpieza.
El lanzamiento de estas nuevas directrices viene plasmado en el siguiente vídeo “Cada movimiento cuenta”. Enlace al vídeo
“La actividad física es buena para el corazón, el cuerpo y la mente”
Este es otro de los principales mensajes que lanza la OMS para fomentar la actividad física y reducir los hábitos sedentarios, y es que, realizar una actividad física con regularidad puede prevenir y ayudar a manejar las cardiopatías, la diabetes de tipo 2 y el cáncer. Además, la actividad física puede reducir los síntomas de depresión y ansiedad, y mejorar la concentración, el aprendizaje y el bienestar en general.